Mantener las caderas estables y flexibles es de gran importancia a todos los niveles.
Gracias a ellas iniciamos el movimiento de avanzar, tanto físicamente al caminar, como sutilmente con todo lo que conlleva en cuanto a avanzar en la vida (miedos, inseguridades, apegos, escasez,…). También nos ayudan a sostener sin esfuerzo la postura de meditación, así como un gran número de asanas que requieren gran apertura.
Por todo ello vamos a dedicar unos minutos a la apertura de caderas, para flexibilizar la zona y aliviar la tensión acumulada. Puede que no lo sepas, pero aquí se originan muchos de los dolores en la parte baja de la espalda, así que esta corta serie te ayudará también a aliviarlos.
Sólo vigila las rodillas, ya que este tipo de asanas suele poner bastante presión en ellas. Pero no te preocupes si no puedes hacerlo perfecto, lo más importante es que no te hagas daño y aceptes el punto en el que estás, para trabajar y avanzar desde ahí.
Te cuento más sobre esta clase en el vídeo de presentación:
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