El estrés nos saca de nosotr@s mism@s. Hace que nos mantengamos enfocados en todas las demandas que surgen del exterior, como las tareas, los horarios, las prisas,… y así terminamos perdiendo el contacto con nuestro interior.
En el Yoga se dice que hay dos formas de vivir: apresurarte y correr detrás de todo, o dejar que las cosas lleguen a ti. Es cierto que hay obligaciones y compromisos imposibles de eludir. Pero también que todos somos capaces de funcionar mucho mejor cuando lo hacemos desde nuestro núcleo, cuando estamos centrad@s.
Por ello esta clase te ayudará a volver dentro de ti, a retomar el contacto y a establecer de nuevo tu centro. De esta forma no sólo te relajarás, sino que te sentirás más estable, equilibrado y enfocado. Te explico más en la presentación:
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