Continuamos reflexionando sobre nuestra respiración, y en este episodio en concreto, “Controlando la respiración”, vamos a conocer diferentes opiniones respecto a este tema.
Hablamos de la capacidad que tenemos de hacerlo, pero también de si tiene o no sentido, descubriendo diferentes interpretaciones de la palabra pranayama.
Además hacemos una meditación para el control mental. ¡No te la pierdas!
Contenido
- Significado de pranayama.
- Control de la respiración.
- Liberación de la respiración.
- Similitud con la mente.
- Meditación para el control mental: Brahm Kalaa Kriya
Transcripción
A lo largo de los últimos episodios hemos ido viendo cómo existen muchos puntos de vista en relación al tema de la respiración y no es algo tan claro como cabría imaginar.
En realidad, las enseñanzas yóguicas son muy antiguas, y como todo, están sujetas a la evolución y a las distintas interpretaciones. Yo creo que esto es algo positivo porque nos ayuda a mantener la mente abierta, y a no caer en dogmas que afirman poseer la única verdad existente.
Así la semana pasada, en el episodio anterior, te mostraba la controversia entre la respiración y los asanas, o cuál de ellas debe ir primero en la práctica. Veíamos las diferentes posiciones que había al respecto, y cómo cada una de ellas tiene su propia lógica y motivos.
Hoy quiero hacer algo parecido con el tema del control, ya que hablamos continuamente de controlar nuestra respiración, incluso nuestra energía sutil, pero, ¿somos realmente capaces de ello? Y suponiendo que lo seamos, ¿es ético o positivo hacerlo?
Te adelanto ya como spoiler que no voy a responder a estas preguntas, porque lo que me interesa realmente es que reflexionemos juntos, y que tú saques tus propias conclusiones. Así que vamos a conocer de nuevo diferentes enfoques y ejemplos, para seguir adentrándonos en este mundo tan complejo y maravilloso que es tu respiración.
Significado de pranayama
Antes de entrar en materia debemos aclarar que todo este debate tiene su origen en la palabra pranayama. Por lo que al hablar de controlar la respiración, en realidad nos estamos refiriendo al control del Prana, la energía vital, y no tanto a controlar la forma en la que respiras, tomando o expulsando el aire.
Ya hemos visto en otras ocasiones como la práctica de pranayama puede aparecer algo confusa en las enseñanzas, y como ha ido perdiendo peso frente a la práctica más física de los asanas.
Por ello han aparecido diferentes interpretaciones, y aquí nos podemos encontrar con dos versiones que muestran una versión muy interesante de su significado.
Por un lado se puede entender como “prana-yama”, que daría pie al significado más extendido de control de la respiración. Ya que yama se traduce como restricción, control, o algo así como tomar las riendas.
Si lo recuerdas se trata de la primera de las 8 ramas de Patanjali, que descubríamos en el episodio número 47. En él hablábamos de que los primeros pasos de todo yogui tenían que ver con la ética. Así el primero eran los yamas, o limitaciones a nuestra conducta, y el segundo los niyamas, o hábitos positivos.
Por eso esta primera interpretación nos lleva a pensar en que el objetivo del pranayama es controlar la respiración, y, con ella, nuestra energía vital.
Hasta aquí nada nuevo, porque hablamos de ello continuamente, pero atención, porque hay otro enfoque sumamente interesante.
Y es que hay quien define pranayama como “prana-ayama”, lo que nos lleva a un significado completamente opuesto. Aquí ayama significa extensión, expansión o amplitud, y nos lleva a la idea de que el pranayama consiste en liberar y expandir la energía vital.
Similitud con la mente
Así de forma teórica puede que resulte más difícil de comprender, pero vamos a poner un ejemplo para que veas con más claridad a qué me estoy refiriendo.
Cuando estamos haciendo nuestras prácticas de meditación, yo siempre te digo que observes los pensamientos, que aceptes que están ahí, pero que no te apegues a ellos.
Mucha gente habla de controlar la mente como si tuvieras una especie de poder sobrenatural sobre ella y pudieras llegar a dejarla en blanco. En realidad no controlamos nuestras mentes, sino cómo nos relacionamos con ellas. Y desde la relajación, y el permitir que los pensamientos fluyan podemos alcanzar una mayor tranquilidad mental, lo que podría traducirse en que realmente estamos controlando mejor nuestra mente, o por lo menos gozamos de una mejor relación con ella.
Es confuso, lo sé, pero hoy vamos en esa línea. Y además ya te había avisado de que no tengo las respuestas, sólo me interesa abrir el debate y ofrecerte diferentes puntos de vista para que te acerques a tu práctica o a tu camino espiritual con mayor perspectiva.
Entonces esto se aplica a la relación con el Prana. ¿Hasta qué punto nuestro ego nos hace creer que podemos dominarlo y hacer con él lo que queramos?
Obviamente ya hemos sentido en las diferentes meditaciones cómo podemos transformar nuestra energía. Esto es un hecho, así que cierto control sí que tenemos, y de hecho a lo largo de este podcast es todo lo que venimos haciendo.
Igual piensas que me acabo de volver loca y estoy echando por tierra todo el trabajo anterior, pero no es así. Como te digo, todos tenemos la capacidad de transformar nuestro estado a través de diferentes técnicas de respiración.
Hoy se trata de ir un poco más allá y valorar si esa transformación es fruto del control, o de la liberación. Interesante para reflexionar, ¿verdad? Cuando nos detenemos para meditar, o simplemente para hacer una respiración consciente, estamos interviniendo desde la fuerza, o estamos simplemente creando espacio para que la energía fluya?
A mí me recuerda a la idea de que el Yoga y la meditación en realidad no te dan nada, y lo único que hacen es devolverte a tu estado más natural y perfecto.
Siempre creemos que con el Yoga ganamos fuerza, flexibilidad, tranquilidad, paz, concentración, y un sinfín de cosas más. Pero en realidad lo que logramos con el Yoga es deshacernos de todo aquello que nos sobra y que nos está apartando de ser nosotros mismos en nuestra versión más pura y auténtica.
En ambos casos el responsable es el ego, ya que nos hace creer que nosotros controlamos, y que podemos actuar en las demás cosas para modificarlas a nuestro antojo.
Hoy te invito a acercarte a la otra opción, a dar lo mejor de ti siempre, no sólo en tus prácticas, y a hacerlo creando el espacio necesario para que la vida fluya a través de ti, que toda la energía fluya a través de ti.
Comprueba lo distinto que es este enfoque y los cambios tan grandes que puede producir en tu vida, en tu práctica y en todo tu camino personal.
Meditación para el control mental: Brahm Kalaa Kriya
- Para abrir el espacio: siéntate con la espalda recta, coloca las manos en el mudra de plegaria y canta 3 veces Ong Namo Guru Dev Namo.
- Ojos: cerrados.
- Postura: dentado en postura Fácil, dobla los brazos a 90 grados y colócalos por delante de tu cuerpo, cruzados a la altura del pecho, de forma que el antebrazo derecho apoye sobre el izquierdo. En cada mano los dedos permanecen juntos y estirados. Mantén la postura firme sosteniéndote desde el abdomen y estirando desde los hombros.
- Respiración: natural, poco a poco se irá haciendo más lenta.
- Tiempo: 3 minutos.
- Para terminar: inhala profundo, sostén brevemente el aire dentro y exhalando relaja.
- Para cerrar el espacio: recita el Eterno Sol “que el Eterno Sol te ilumine, el amor te rodee y la luz pura interior, guíe tu camino” y canta 3 veces Sat Nam.