Virabhadrasana: significado en sánscrito
Virabhadrasana puede traducirse del sáncrito como Postura del Guerrero. En realidad representa a un grupo de posturas de yoga conocidas como «los guerreros». Todas ellas provienen de una historia mitológica en la que Shiva no es aceptado por el padre de su mujer, Sati. Ella muere por el dolor que este desprecio le produce y Shiva busca venganza, corta su pelo y crea con él un fiero guerrero, al que llama Virabhadra.
- Vira – Héroe
- Bhadra – Amigo
- Asana – Postura
Tipo de asana: postura de pie
Los asanas que realizamos manteniéndonos de pie suponen una base importante para la práctica. Nos ayudan a tomar conciencia de la alineación corporal y de la importancia del apoyo en el suelo (enraizamiento).
Aprendemos a utilizar la fuerza de la gravedad a nuestro favor, de forma que cada postura adquiere el equilibrio perfecto entre fuerza y ligereza.
La postura del arquero, de la que posteriormente se generan todas las posturas de los guerreros, se emplea principalmente en Kundalini Yoga. Es un asana que beneficia al hígado y fortalece el cuerpo radiante, potenciando nuestro resplandor.
Postura del Arquero: paso a paso
Cómo entrar:
- Te preparas de pie, con los pies separados una amplia distancia, en torno a un metro o más dependiendo de tu tamaño.
- Giras el pie derecho hacia fuera de forma que quede mirando hacia el lateral y mantienes el pie izquierdo mirando recto al frente.
- Flexionas la rodilla derecha llevando ligeramente tu peso hacia ese lado. Mantienes la pierna izquierda estirada.
- Basculas la pelvis para que la columna se mantenga recta y la cabeza quede en línea sobre la cadera.
- Estiras el brazo derecho y cierras ambas manos en puños dejando los pulgares fuera.
- Imagina que con la mano derecha sostienes un arco, el brazo se mantiene todo el tiempo estirado.
- Con la mano izquierda tensas la cuerda hacia atrás. De este modo el brazo izquierdo se queda flexionado y la mano izquierda queda cerca del hombro.
- Fija la mirada en el pulgar derecho, el de la mano que sostiene el arco, como si estuvieses enfocado en un objetivo concreto.
- Después de unas respiraciones profundas deshaces y repites igual al otro lado.
Cómo salir:
- Inhalando profundamente estiras ambas piernas y te incorporas de nuevo arriba.
- Exhalando relajas los brazos y preparas los pies al otro lado. Cuando hayas completado la postura con ambas piernas, en esta exhalación con cuidado acercas los pies para deshacer y relajar.
Puntos que debemos revisar
- Ten cuidado de no inclinar el tronco hacia el lado de la pierna flexionada.
- Mantén la columna recta y bien alineada, la zona lumbar no debe arquearse.
- Asegúrate de mantener los brazos dentro de una línea recta en paralelo al suelo, es decir, las manos, codos y antebrazos se mantienen a la altura de los hombros.
- Reparte bien el peso de forma equilibrada en las dos piernas. Sobre la pierna flexionada habrá ligeramente más peso, pero esto afecta más a la intención de la postura que al equilibrio general.
- La rodilla de la pierna flexionada se mantiene justo sobre el tobillo, siempre en ángulo recto.
Virabhadrasana: los errores más comunes
- No separar lo suficiente los pies. Cuando esto ocurre la rodilla de la pierna flexionada va más allá del tobillo, formando un ángulo agudo. Hay que evitarlo para no poner en riesgo las rodillas.
- Dejar caer el codo del brazo que tensa, perdiendo toda la fuerza e intención de la postura.
- Arquear la columna, llevando el coxis hacia arriba y atrás.
- Construir la postura desde la parte superior del tronco y los hombros, en lugar del abdomen. Esto nos lleva a inclinarnos hacia la pierna flexionada, y a desplazar todo el tronco hacia el lado.
Si quieres ir un poco más allá
- Mantén activo mulbhand y revisa la alineación de la columna.
- Siente como la fuerza de la postura nace del abdomen y como desde él se propaga en todas direcciones. Continúa dando amplitud y espacio al asana.
- Prueba a bajar más cerca del suelo.
- Haz la postura en movimiento, flexionando la rodilla un poco más para acercarte al suelo y regresando de nuevo a la postura original.
- Practica respiración de fuego mientras realizas este asana.
Postura del Arquero: contraindicaciones
Si padeces alguna lesión en las cervicales no fuerces el giro del cuello, puedes mantener la mirada al frente.
En caso de lesión lumbar debes vigilar con atención que la columna se mantenga alineada y la pelvis ligeramente basculada.
Ten cuidado si tienes problemas con las rodillas. Asegúrate de mantener la rodilla flexionada justo sobre el tobillo y no sobre extender la pierna estirada.