Quiero confesarte que este ha sido el encuentro más difícil que he hecho, y a la vez el que más me he alegrado de hacer. Cuando llegaba la hora de conectar estaba inmersa en una gran crisis personal, y por momentos pensaba que no era capaz de ponerme delante del ordenador. Este debe ser uno de los trabajos más gratificantes del mundo, pero resuelta muy difícil de llevar a cabo cuando no estás al cien por cien, y cuando no tienes fuerzas para sostenerte a ti misma.
Pero por suerte ahí estabais vosotras para apoyarme y comprender que al final todos somos humanos y no podemos controlar que todo en la vida sea perfecto. Así que aquí tenéis este encuentro. Seguramente no con la mejor imagen ni claridad mental, pero con el cien por cien de corazón y de gratitud por este grupo y esta energía tan bonita que compartimos cuando nos juntamos.
Me alegra y enorgullece muchísimo ver cómo sois mucho más que compañeras, cómo os sirven y ayudan todas estas prácticas, y como cada semana se refuerza el vínculo. Quiero daros millones de gracias a todos por estar presentes de una u otra forma, y animaros a participar y compartir, porque sea por lo que sea que estás pasando, no estás solo. Y muchas veces una simple charla es la mejor de las terapias.
Hoy hemos hablado del aura, de la necesidad de encontrar nuestro propio espacio y lo difícil que es a veces gestionar el equilibrio entre estar en contacto con los demás y mantenerte también en contacto contigo mismo.
Hemos compartido una meditación muy corta para ayudarte a equilibrar tu campo magnético, y en el vídeo te explico por qué es tan importante en este momento. Espero que lo disfrutes.
Te recuerdo que los encuentros continuarán durante todo el verano, siempre en horario de mañana, así que te espero en el próximo. Puedes identificarte y acceder, o suscribirte para formar parte y disfrutar de todo el contenido.
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